domingo, 17 de febrero de 2008

Si Supieras...



Si supieras como extraño
de tus labios el calor
de tus ojos el primor
que se encuentra en tus pestañas
que como telaraña
entreteje el corazón.

Que mis ojos sin razón
te miran y no lo quieren
si supieras, que prefieren
dejar de ver de una vez.

Yo no tengo sentimientos
para nadie, amor mío
porque en el sol hace frío
y en la luna hay calor.

Y el corazón se llena
de pavoroso temor
cuando miro en derredor
sin tener ya tu presencia.

Si supieras que tu ausencia
es la clave del dolor
que existe en mi corazón
y no puedo detener.

Si mi vida ha de ser desventura
prefiero a la amargura
una dicha artificial,
del sol en el ventanal
de la casa que no tengo.

Si supieras...
¡Cuando yo voy es que vengo
y cuando vengo me voy!
Porque no estoy en el mundo
si no tengo tu cariño.
Si supieras que hasta un niño
la desesperación advierte
que yo tengo por quererte
y que no puedo evitar.

1975

Te amo y me pesa tanto...




Me duele sentir así
un amor tan grande
tan lleno de esperanzas.
Me duele y aún así
¿No he de evitarlo?

¡Me traicionan las fuerzas
las fibras del corazón
se desgastan en lucha
tronchan las ansias!

Vacíos de sueños se deshojan
mis rosales, se quiebran mis arboledas
arrasan con mis sembrados
tus vientos, tus huracanes.

Se tuestan mis cafetales
al contacto de tu sol ardiente
que aún siendo naciente
quema con su contacto.

¡Te amo y me pesa tanto
que quisiera no quererte!


1975

Tibia luna





Tibia luna de mi noche de más gris
en el seco manantial de mi vida
aún quedan gotas para ti.

Tibia luna de mi noche de luz
conozco lumbres que alumbran
pero nadie como tú.

Tibia luna, tú que alivias
mis horas de desespero
y alumbras las noches en que quiero.
Tú si sabes cuán largas son las noches
de espera que se ansían.
Cuán cortas son las noches
de tierna y dulce compañía.

1975

sábado, 16 de febrero de 2008

El color de mis sueños...



El color de mis sueños
es como la madrugada
huele a limpio
se siente a mañana.

El color de mis sueños
se asemeja al sol
sus rayos traen vida
en su luz hay calor.

El color de mis sueños
es como tú eres
respira frescura
se prefiere.
Se prefiere la brisa del mar
la luna, las estrellas
el color de mis sueños
se parecen a ellas
que suspira la brisa
al chocar con tu piel
el color de mis sueños
permanece con él.

El color de mis surños
se parece al mar
es profundo, hierve,
se siente vibrar.

1975

Algo, sobre ti, sobre mí.



Este poema es para ti
porque te quiero.
Lo escribo con consuelo
con resignación, con sosiego.

Las circunstancias
no me permiten otra salida
que aceptar
las leyes de la vida.

La sociedad dicta pautas
el Padre las leyes buenas
que para una mujer libre
de su carne son condena.

Te diré algo sobre ti
si me permites.
Te resistes
la soledad cubre tu alma
y te hace triste.
Lo he notado a pesar de tu sonrisa
por cosas peculiares
tus enojos, tus prisas.

Algo sobre ti, sobre mí
no describiría
cuán triste puede ser la vida
cuán sola, cuán vacía.

1975

Cuando… entonces…

Cuando encuentre en ti en la bruma
la suavidad de la espuma.
Contigo me quedaré.
Si me quieres, te querré.
No importa donde vayas, yo iré.

Cuando encuentre en ti el desvelo
de mis noches sin dormir
mis días por vivir yo te daré.

Cuando encuentre en ti el calor
de mis días de verano
de mi sol, de mi llano,
del horizonte lejano
de mis sueños, de mi ser.
Te he de querer.

Cuando encuentre en ti
el latido de la vida que perdura
en la hoja que alimenta
en la fruta que madura
lo eternal de lo que dura.
Entonces te querré.

Cuando hables las verdades
cuando laves bien tus ojos
de ceguera embadurnados
cuando veas en lo rojo, lo rosado
y mires al futuro
sin las nieblas del pasado.
Entonces te amaré.
Porque yo quiero
pacientemente, con suavidad
sin desespero.

1975

Todo lo tuyo es mío…


En la miel
del color de tu piel.
Aún en sus poros
se esconde calor para mí.
En la suavidad de tu boca
mermelada de fresa
escondida entre besos
aún tienes para mí.

En la piel que cubre la carne
que rodea la armazón de tu cuerpo.
Allá en tu energía
tienes amor para mí.

Todo cuanto hay en tí es mío
aunque no toque
ni con la punta de mi dedo
un trozo de tí.
Tu sabes... es mío cuanto posees.
Todo lo que hay en tí.

1975